Hoy quiero contaros 5 cosas sobre ella que quizás no sabíais
1- La "Enfermedad del mosquito" no la transmite un mosquito
Muchos de vosotros la conocéis como enfermedad del mosquito, pero realmente quien transmite el parásito de la Leishmania no es exactamente un mosquito. Los Flebotomos, que así se llaman, son insectos dípteros cuyo aspecto se parece al de un mosquito, pero no lo es. Ponen los huevos en la tierra y no en el agua como los mosquitos. Están activos entre Mayo y Octubre y les encantan las noches cálidas y con el viento en calma para salir a alimentarse.
2- La Leishmaniosis no es sólo una enfermedad de los perros
Aunque la conocemos por su alta prevalencia en los perros, la infección se da también en gatos, caballos, zorros, ratones, liebres y conejos.
3- Las personas podemos infectarnos de Leishmaniosis
Aunque es muy poco habitual y sólo afecta a personas inmunodeprimidas (especialmente enfermos de VIH, pacientes oncológicos,..) se dan en España todos los años varios casos de personas infectadas por Leishmania. Sin embargo, convivir con un perro enfermo correctamente tratado no supone un riesgo para las personas sanas.
4- La enfermedad no afecta a todas las razas por igual
Se ha demostrado que no todas las razas tienen la misma susceptibilidad a sufrir la enfermedad y así los Boxer, Cocker Spaniel, Rottweiler y Pastor Alemás son más sensibles a desarrollar la enfermedad y otras como el Podenco ibicenco y los perros mestizos de áreas endémicas parecen ser más resistentes.
5- Existe una vacuna para la Leishmaniosis
Desde hace un tiempo existe una vacuna que aunque no elimina la infección, reduce el riesgo de que se desarrolle la enfermedad. Sólo puede usarse en perros después de comprobar que no están infectados.
¿Qué podemos hacer para prevenir?
Existen bastantes productos con repelentes eficaces frente a los flebotomos y los animales no infectados pueden vacunarse a partir de los 6 meses de edad. Aún así no podemos dar un 100% de protección a nuestros perros frente a la infección por Leishmania.
